¡No
es extraño que pasen estas cosas!. Hasta hace poco se ofertaban en La
Diputación de Lugo, centro mediador, ofertas de empleo, con contrato
indefinido para este sitio. (No más de 1030 euros BRUTOS al mes y de ahí
para abajo). ¡Como para ir desde Lugo todos los días! Por otro lado, en
ocasiones no se valora la capacidad, la profesionalidad y la entrega a
la hora de elegir profesionales adecuados. (Con perdón de los buenos
profesionales, que los hay). Y luego pasan estas cositas........ señores
empleadores...................!!!!!!!!
La Xunta alerta de que no
tolerará casos como el de la residencia de Fonsagrada
La conselleira de Política Social,
Fabiola García, afirmó
este jueves que la Xunta de Galicia "no va a admitir" situaciones
como las vividas por los ancianos que estaban en la residencia privada de la
tercera edad
Vivienda Comunitaria Burón I y II de
A
Pobra de Burón, en
A Fonsagrada, y que se
"actuará con toda contundencia" por parte del gobierno gallego ante
"cualquier irregularidad".
"Recibimos un aviso de los servicios sociales e inmediatamente acudió
la inspección de la Xunta. Llamamos a la Guardia Civil y decidimos trasladar a
todos los residentes al hospital público de Lugo para que se les hiciese un
chequeo completo”, informó la conselleira, además de avisar “a los
familiares" y a la "Fiscalía".
García aseguró que "la Xunta no va a admitir esto de ninguna
manera", porque
las personas mayores se merecen "los mejores
cuidados”, por sus “seres queridos", pero también por los
trabajadores de las residencias que "hacen un trabajo magnífico y no se
merecen que su imagen se vea dañada".
"Una cosa es que entre un virus" en unas instalaciones dedicadas
al cuidado de personas mayores, dijo Fabiola García en referencia al Covid-19,
"y otra cosa es que en una residencia
no se esté atendiendo a los
mayores con la dignidad que se merecen".
Recordó que la obligación de "tratar a los mayores con
todo el
cariño y el cuidado que se merecen", por lo que "no podemos
ni vamos a permitir casos como este. Se actuará con toda contundencia ante
cualquier irregularidad", zanjó.
CIERRE. La Consellería de Política Social procedió
este miércoles al cierre de la residencia a raíz de una denuncia sobre las
deplorables condiciones en las que vivían los 29 internos. Los
ancianos fueron trasladados a un ala sin utilizar del hospital Lucus Augusti,
donde permanecerán antes de ser recolocados en otros centros.
El departamento autonómico tomó la decisión de clausurar las instalaciones
después de que la Inspección de Servizos Sociais recibiese el martes un informe
del Concello de A Fonsagrada que alertaba del inadecuado funcionamiento de
estas viviendas comunitarias. El origen de este caso está en una denuncia
anónima, en la que se aportaban imágenes sobre el funcionamiento e la
residencia.
Varios ancianos estaban atados a la cama y algún enfermo
tenía llagas.
Los inspectores se personaron este miércoles en A Pobra de Burón y permanecieron
varias horas en los edificios, acompañados de los agentes de la Guardia Civil,
que les prestaron apoyo y levantaron un atestado. Otra de las irregularidades
detectadas fue el
número excesivo de internos. La residencia
estaba autorizada para 23 personas, pero acogía a 29.
El objetivo del cierre y del traslado de los usuarios es "garantir a
súa saúde e procurar que gocen da atención e dos coidados sociosanitarios que
necesitan", según fuentes de Política Social. "Trátase dunha primeira
fase do proceso antes de
decidir onde se reubican, en consenso
coas familias", agregó un portavoz de la consellería.
La Xunta remitió un informe a la Fiscalía sobre los hechos
"constatados" por sus inspectores por
si fueran constitutivos
de delito penal. Si es así, el fiscal los trasladará al juzgado, algo
que estimaban como probable fuentes consultadas por este periódico.
Las trabajadoras de estas viviendas comunitarias, ubicadas en la
avenida
Lenin de A Pobra de Burón, permanecieron en las instalaciones.
Su
propietaria estaba ilocalizable.
EN EL HULA. Los ancianos quedaron albergados en la noche de
este miércoles en una
planta vacía del hospital Lucus Augusti,
donde permanecerán como si estuviesen en una residencia. Llegaron en una
caravana de ambulancias, tras ser evacuados a última hora de la tarde. La
caravana partió una vez que se comprobó que
todos dieron negativo en
las pruebas de coronavirus. Un equipo sanitario se desplazó por la
mañana desde el Hula hasta A Pobra de Burón para hacerles el test.